“El gobierno tiene miedo de perder
el control, por eso crea múltiples leyes e instituciones para mantenerlo”
@BarbaraCabrera
Esta es la
primera Nornilandia de 2018. Año plagado de complejidades y decisiones que
determinarán el rumbo del mundo, en general; así como de México, en particular.
El año que se
nos fue, dejó un obsequio no deseado: la Ley de Seguridad Interior. [Consultable aquí http://bit.ly/2mjc7u4]
Con este “regalito” auspiciado por Enrique Peña Nieto y curuleros secuaces [véase en el siguiente enlace la
votación de la LSI. Así en el Senado http://bit.ly/2CWfn8V
(páginas 25 a 27) y de esta manera en la
Cámara de Diputados http://bit.ly/2mcuW1i]
estamos, sin duda, ante la inminente y detestable militarización del país.
2018, año en que
el 1 de julio votaremos 3,416 cargos. Ésta es considerada como la elección más grande
y compleja de todas. Y como cereza en el pastel de la escasa democracia y
creciente impunidad, aderezada por el miedo gubernamental se pretende combatir
la violencia y el crimen organizado con la permanencia e irrupción en la calle
de las Fuerzas Armadas. Se dice respetarán los derechos humanos ¿les creemos?
Digo, por aquello de que para toda ley, existen letras chiquitas e
interpretaciones diversas.
Y si eso no
fuera suficiente, en 2018 se lanzarán 58.1 millones de bots para inducir el voto e influir en las redes, así lo revela un
Estudio sobre los Hábitos de los Usuarios de Internet en México 2017, realizado
por Estadística Digital. De ahí la importancia de informarnos, estar atentos,
contrastar información; para no caer en las garras digitales de estos
especímenes.
Ley de Seguridad
Interior y elecciones, desde mi perspectiva, formarán parte de una desesperada
estrategia de control, para mantener al PRI en Los Pinos. Son para el gobierno
y el mantenimiento del status quo, una siniestra mancuerna.
Y aunque el
escenario pareciera borroso, hay algo que nosotros, los ciudadanos, podemos
hacer: estar informados, contrastar información, generar y promover elementos
de conocimiento y análisis al alcance de todos; vincularnos, organizarnos y
sobre todo acudir este 1 de julio a votar; porque si TODOS asistimos a ejercer
nuestro derecho a elegir, entonces pondremos en aprietos al sistema y el
régimen comenzará a tomarnos en serio y créanme no habrá fuerza bruta que nos
detenga.
Nota
mental: Ya no podemos mandar al diablo a las instituciones y al orden
impunemente establecido, de lo contrario nos caerá la Ley de Seguridad
Nacional.
Es todo por hoy.
¡Nos leemos la
próxima!